La crisis de Damián

El Gordo extraña mucho a su familia. Por eso entró al confesionario pare manifestar su intención de irse, pero, por ahora, Gran Hermano lo convenció de seguir en el juego.
Damián está en crisis. Se siente muy angustiado, extraña a su familia y está cómodo con sus compañeros. El siente que la entrada a la casa lo cambió, se desconoce.

Por eso, este miércoles ingresó al confesionario y le dijo a Gran Hermano que tenía intenciones de abandonar la Casa. Antes, había mantenido un diálogo con Alan, en el que el Pelado trató de convencerlo (quién sabe si sinceramente) de que se quedara.

De todas formas, parece que tras la charla con Gran Hermano, el Gordo decidió continuar en el juego, aunque hay que ver hasta cuándo.

Evidentemente, Damián tiene problemas de convivencia. Posee un perfil de ganador y se convirtió en el líder de los atunes (un grupo conformado sólo por mujeres), pero sólo si se adapta al resto de sus compañeros podrá llegar a la final.